La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ha anticipado que, en el marco de la Ley de Emprendedores que elabora el Gobierno, se ayudará a los empresarios que hayan naufragado en su primer proyecto para que “puedan cuanto antes librarse de sus cargas” y perseverar en su intento de poner en marcha una compañía. Según la misma portavoz del Gobierno, España, que ha visto desaparecer más de 400.000 pequeñas y medianas empresas desde 2007, está necesitada sin duda de nueva savia empresarial que dinamice la actividad económica y estimule la creación de puestos de trabajo, especialmente entre el colectivo más joven, donde la tasa de paro supera un inasumible 50%. Entretanto, España sigue siendo uno de los miembros de la OCDE en los que más cuesta abrir una empresa, tanto en trámites como en costes y tiempo. Además, la vicepresidenta ha anunciado la creación de un fondo de inversión para emprendedores de 40 millones de euros, destinado a capital semilla, que se realizará a través de ENISA, empresa de la dirección general de Pymes, dependiente del Ministerio de Industria. Según ha explicado Sáenz de Santamaría, el objetivo es que ENISA -cuyo presupuesto para 2012 asciende a 100 millones de euros- cofinancie, junto con “socios inversores seleccionados” a empresas de reciente creación a través de créditos participativos. El proyecto, que se incluirá en la futura Ley de Emprendedores, se llamará ‘Spain Startup Investment Fund’. Además, el Gobierno central estudia que en la nueva ley de emprendedores que está preparando el Gobierno se incluya que si fracasa el negocio de un autónomo, este no deba responder con el hogar familiar, como ocurre ahora, y habrá un «límite inembargable».
Junto a nuestro colaborador Jorge Ramos y a Domingo Cienfuegos Jovellanos; empresario Asturiano, miembro del circulo de empresarios.