Seguro que muchos de ustedes han escuchado alguna vez aquello de que antes de las autopistas y autovías por doquier, las ardillas podían cruzar la Península de norte a sur sin pisar el suelo. Tal vez sea exagerada esta afirmación, pero ha servido de punto de partida para la iniciativa de la que hablamos a continuación.
Juan Balero, promotor del proyecto “El camino de las ardillas”.