La crisis ha llevado a los países que forman la Unión Europea a acelerar el proceso ya iniciado de creación de una nueva Europa más fuerte, con unidad fiscal, económica, política y, desde hace apenas una semana, también se pretende con unidad bancaria. Este es el objetivo que han empezado a marcarse los principales líderes comunitarios como respuesta a la gravedad de la crisis bancaria que adquiere en España unos niveles de extrema gravedad. Más de sesenta años después de la fundación de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA) como primer embrión de la Unión Europea, la Comisión Europea (CE), el Consejo de la UE, el Banco Central Europeo (BCE) y el Eurogrupo trabajan en un plan global, por encargo de los líderes de la UE, para llevar a cabo una reestructuración a fondo de la zona del euro. El asunto forma parte, al parecer, de la agenda de la próxima cumbre comunitaria prevista para finales de junio. Entretanto, la tasa de paro ha descendido en España por segundo mes consecutivo, la bolsa ha comenzado a recuperarse después de semanas de desplome y la Prima de Riesgo ha empezado a bajar después de una aparentemente imparable subida que ha hecho temer la intervención de España por la Unión Europea.
Para analizar el tema, contamos con nuestro amigo y colaborador Jorge Ramos; y Olga González, economista del Despacho de GARRIGUES ABOGADOS.