Apunten este nombre: el grafeno. En pocos años, es probable que este material revolucione nuestra vida diaria tanto como en su día lo hizo el plástico. Sus virtudes, es mucho más ligero, más resistente y más fino que los demás materiales conocidos.
Y, además, es un excelente conductor de electricidad. Tanto es así que la Comisión Europea aprobó el lunes una partida de mil millones de euros para la investigación de las propiedades y utilidades del grafeno durante los próximos 10 años.
Dos centros asturianos constan en la lista de los 650 grupos de todo el mundo que recibirán parte de ese dinero: la Universidad de Oviedo y el Instituto del Carbón.
Juan Ignacio Paredes, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Instituto del Carbón.